Hola a todos lectores, hoy vengo cargado con un nuevo tema, un tema que siempre nos pareció una historia de fantasía y mitología, pero cambiando unos pocos datos y dando unos finos trazos con el pincel de la investigación, la ficción, otra vez supera a la realidad.
Hoy os hablaré de Vlad Dráculea, el empalador o debería decir el Conde Drácula.
Este personaje tan pintoresco nació allá por el año 1431 en Sighiçoara, Rumanía, que consiguió ser el Príncipe de Valaquia entre 1456 y 1462. Luchó de miles de formas contra el imperio otomano y fue de gran ayuda para que estos no extendieran sus dominios, su religión en un primer momento fue la de ortodoxo, pero más adelante se convirtió al catolicismo.
Hoy día es considerado un héroe nacional en Rumanía.
Este gobernante destacó en la faceta bélica al ser un excelente espadachín y un gran estratega, pero no todo su fama viene de esas dotes que tenía en el ardor de batalla, sino que era famoso por la manera que tenía de torturar a las personas, las trataba como si fuesen pinchos morunos, utilizaba la técnica del empalamiento, una técnica que consistía en introducir un palo de aproximadamente 3,5 metros por el recto de una persona y sujetarlo con un clavo y más adelante levantarlo para que la víctima muriese de forma lenta; llegó a matar según fuentes escritas de la época entre 40.000 y 100.000 personas, todos ellos eran o delincuentes o traidores politicos; no soportaba el adulterio ni la mentira.
Se dice que había bosques en los que yacían más de 30.000 personas empaladas y que Vlad desayunaba enfrente de ellos con el fin de burlarse de ellos, mientras morían lenta y dolorosamente. Una leyenda muy negra cuenta que el Príncipe de Valaquia, hacía esto porque quería la sangre humana, ya que pensaba que beberla le otorgaría la eterna juventud, no sabemos si envejecía o no, lo que si sabemos es que mantenerse joven no le habría servido para nada pues en el año 1476, cerca de la ciudad de Bucarest fue derrotado y asesinado en plena batalla.
Según los datos que tenemos, a ciencia cierta sabemos que el escritor Bram Stoker al compilar su obra maestra Conde Drácula, acudió a este personaje, a su realidad pero también mucho al mito y añadió alguna pincelada de mitología irlandesa y británica, le dio trazos de vampiro, lo colocó en un castillo bonito y Voilá!, HE AQUÍ NUESTRO QUERÍDISIMO CONDE DRÁCULA, un saludo a todos, no tengan pesadillas con este ser tan siniestro, si al final es una persona como todos, un saludo.
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